Estadilla a 1 de
noviembre de 2013
A la atención del
Sr. Justicia de Aragón
Distinguido señor:
Por la presente
paso a relatarle un asunto para el que solicito su asesoramiento y opinión,
dado que lo sucedido ha sido cuanto menos una gestión imprudente del Alcalde de
mi localidad y de los miembros de la Corporación del anterior mandato, que ha
llevado a que la localidad de la que soy concejal en la actualidad, a estar
situada en el puesto 53 de los consistorios con mayor deuda por habitante de
España -8117 municipios-.
En el año 1999, el
Ayuntamiento de la localidad presidido por el que hoy sigue siendo su alcalde por
mayoría absoluta, constituyó una Sociedad Limitada conjuntamente con una
Cooperativa Agraria también de la localidad, ambas participadas al 50%. El
nombre de la empresa era Promociones Sociales Estadilla S.L. El objeto de la
misma fue realizar una promoción inmobiliaria en una antigua edificación
propiedad de la Cooperativa, la cual tuvo que derruirse. Para el inicio de la
promoción y una vez firmada una hipoteca con la entidad Multicaja, hoy
Bantierra, por un importe de 2.283.000 euros (380 millones de pesetas), se
acometieron diversos gastos previos al comienzo de las obras, entre ellos el
pago a la misma cooperativa por el edificio de su propiedad (17.000.000 de
pesetas, que utilizó para construirse unas nuevas oficinas), la demolición de
la edificación, cese de actividad de un bar-restaurante existente, etc.
Hecho esto, se
inició la promoción, la cual constaba entre otras de viviendas libres, bajos
comerciales, habitaciones de turismo rural, garajes, bar-restaurante, salón de
actos y biblioteca. Se adjudicó la obra por un montante de 2.002.493 euros y se
finalizó la promoción con un desfase presupuestario importante: 354.500 euros.
En ese instante se
comenzó a explotar la venta de los inmuebles existentes. Finalizada la venta de
prácticamente todo lo que era objeto de poder vender (viviendas, locales,
garajes en planta sótano…) las ventas no llegaron ni al millón de euros (762.000
euros), quedando un coste de hipoteca por amortizar de más de 1.400.000 euros a
los que hay que sumar los desfases de obra. Obviamente seguía tratándose de una
empresa de carácter mercantil que no operaba bajo criterios de control y
contratación pública.
Llegado el año
2007, la Cooperativa decide desprenderse de su parte correspondiente en la
Sociedad Limitada puesto que a todas luces la promoción ha sido una ruina
imposible de poder pagar por los ingresos que ella misma ha sido capaz de
generar. Desconocemos si esta empresa mercantil hizo en su momento un estudio
de viabilidad, unos mínimos números para saber si era o no verdaderamente
rentable hacer esta promoción.
En cualquier caso,
es en el año 2007 cuando llegados a este punto se podría haber disuelto la
sociedad y que el banco se quedara con la edificación y la hipoteca. El
Ayuntamiento, que no podía admitir que el proyecto había resultado una ruina
por el desgaste político que le ocasionaría, decidió comprar la parte de las
acciones de la Cooperativa (2.103 euros), pasando entonces la empresa a
denominarse Promociones Solciales Estadilla S.L.U. Entendemos que en ese
momento el Ayuntamiento cometió cuando menos una irresponsable gestión porque
se quedó con las acciones y liberó por completo a la Cooperativa del 50% de
cargas que tenía en Promociones Sociales Estadilla S.L., personados en las
dependencias municipales para comprobar el expediente, vemos que no consta
siquiera que haya existido una mínima valoración que demuestre que lo que el
Ayuntamiento se estaba quedando, lo que no se había vendido, valía lo mismo que
la hipoteca que quedaba por pagar (1.400.000 euros más el desfase de obra). Es
obvio que cualquier mínima persona es capaz de entender que lo que se quedó el
Ayuntamiento no vale esa cantidad, por cuanto vendidas las viviendas, los
garajes y los locales comerciales, no se llegó al millón de euros de ingresos. Las
cargas eran muy superiores al valor de la finca.
Por si todo esto no
fuera suficiente, señalar que hoy el bar-restaurante y viviendas de turismo
rural están alquiladas por unos 9.000 euros al año, por lo que si aplicamos la
legislación vigente que dice que no se puede alquilar por menos del 6% del
valor del inmueble, obtenemos que las viviendas de turismo rural y el bar
restaurante no tendría un valor superior a los 150.000 euros. Tampoco hemos
podido saber si se siguieron todos los procedimientos para justificar la
creación y necesidad de constituir una empresa pública, que dicho sea de paso,
fue disuelta escasos años después, y ahora toda esa deuda computa a esta
entidad municipal.
Por todo ello,
solicitamos su asesoramiento, al objeto de comprobar si el Ayuntamiento de
Estadilla ha podido cometer algún tipo de infracción legal en la tramitación de
este asunto, por cuanto es obvio que dos entidades, una cooperativa y un
Ayuntamiento, constituyen una empresa mercantil y suscriben una hipoteca para
llevar a cabo una promoción. En ese momento tanto la Cooperativa como el
Ayuntamiento, pero también la entidad bancaria, asumen un riesgo y es
finalemente el Ayuntamiento y por tanto todos los vecinos de Estadilla los que
están asumiendo el pago y el riesgo que otros contrajeron. La cooperativa tiene
unas oficinas nuevas y la entidad bancaria sigue cobrando mensualmente su
hipoteca aún a costa de que el Ayuntamiento de Estadilla esté rozando la ruina
económica.
En espera de sus
noticias, se despide atentamente:
Adrián Perna Loncán
Portavoz de IU en
el Ayuntamiento de Estadilla
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