CAMBIAR ESTADILLA: Mystic River

Esta semana ha visitado el río Cinca el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Xavier de Pedro (PAR), en relación a los caudales del Cinca-Ésera señaló que:

“hay muchos intereses concesionales reconocidos que deben armonizarse y el caudal ecológico debe respetarse. Además, es una año complicado por la sequía, hay un plan de demarcación de cuenca en información pública y trataremos de complacer a todos los usuarios con derechos reconocidos, lúdicos y deportivos como en este caso concreto”.

Unas declaraciones que navegan, sin agua, entre la retórica y lo ambiguo. En ningún caso nombra al río como “usuario con derechos reconocidos”, será el último de la cola y, si no llega ni gota, ancha será Castilla.
El presidente de la CHE dice que hay que respetar el caudal ecológico, cosa que será imposible porque el caudal ecológico es el que baja por el río, tendrán que buscarle otro nombre, como dice el profesor de la Universidad de Zaragoza, Francisco Javier Martínez Gil – Nueva Cultura del Agua-: “Cada río tiene las aguas que tiene que tener. Unas veces pocas y otras muchas, al ritmo que la naturaleza le ha dado para cumplir sus funciones…”, y en todo caso será la CHE quien vigile DE FORMA EFECTIVA para que no se comentan abusos en el tramo del río.
Un discurso que ampara la mercantilización del río como norma fundamental, lo prioritario y normal es secar el segundo río de Aragón y después con esa agua criar arroz en un desierto -Monegros-. Una gran disfunción en los gestores de nuestro ríos.

Hace unos años se realizó el estudio titulado – Análisis, diagnóstico y propuestas para la gestión del río Cinca en el tramo presa de El Grado- confluencia del Vero- , pero de actual vigencia. (Enlace estudio PDF)

El estudio analizaba 20 kilómetros de cauce desde la presa de El Grado hasta la confluencia con el río Vero y 7 kilómetros desde la presa de Barasona hasta la confluencia con el Cinca. En ese punto el Cinca se convierte en el río más “caudaloso” de la provincia oscense y el segundo de Aragón. En este tramo el Cinca tenía un caudal medio anual que variaba de 45 m³/s –El Grado- a unos 75 m³/s en -La Boquera-. El estudio, y como es evidente imaginar, determina que el estado del tramo no es nada bueno porque se ha perdido la dinámica natural del cauce del Cinca, y eso que está declarado como Lugar de Interés Comunitario (LIC), un brindis al sol.

El estudio propone un proceso de renaturalización para el que hacen falta caudales hídricos y sólidos que circulen por el cauce, incluyendo caudales generadores o <<crecidas ecológicas>> que renueven y reactiven el sistema. También indica como imprescindible la revisión de las concesiones hidroeléctricas así como la introducción de una central – Grado III- en la base de la presa para compensar la disminución en la producción de energía de la central Grado II, que habría meses en los que no dispondría de caudales para turbinar. Central que el presidente de la CHE ha descartado a día de hoy. En el plan de cuenca se determina como caudal ecológico para el Ésera (Barasona-Cinca-7 kilómetros) 0,2 m³/s y para el Cinca (El Grado-Vero-20 kilómetros) 0,5 m³/s. La CHE define como caudal ecológico el que: “permita mantener de forma sostenible la funcionalidad y estructura de los ecosistemas acuáticos y de los ecosistemas terrestres asociados, contribuyendo a alcanzar el buen estadio o potencial ecológico en ríos o aguas de transición”. Eso sí, el caudal ecológico varía si hay una central hidroeléctrica en la base de la presa, y en ese caso pasa a 3 m³/s. Evidentemente lo que determina la CHE no es un caudal ecológico, sino el caudal económico y en función de intereses monetarios.

Caudales ecológicos determinados por la CHE (Enlace Plan Hidrológico de Cuenca)

En el anterior estudio citado se remarca que los caudales no pueden ser invariables durante todo el año, cosa que sí determina la CHE, porque en ningún caso se renatuarliza el río, habida cuenta de la complejidad de los procesos hidromorfológicos y biogeoquímicos que se desencadenan en el seno de los ecosistemas fluviales. De lo contrario se convierte el río en una mera acequia de agua y se pierde todo el ecosistema de ribera. Por lo que en el estudio se determinan los llamados caudales de mantenimiento (básico y generador) que tienen como objetivo el recoger la variabilidad natural propia de los ríos y delimita unos caudales y formas de actuar muy distintas a las diagnosticadas por la CHE.

La conclusión del estudio es que es factible un caudal de mantenimiento en periodos húmedos y medios; y en periodos de sequía, las concesiones actuales no se pueden mantener, pues todos los usuarios han de disminuir sus requerimientos.
La transposición de la Directiva Marco del Agua al derecho español supondrá la obligatoriedad de mantener unos caudales en los ríos que permitan recuperar su estado ecológico natural, ¿qué caudales serán? La pregunta del millón, el Plan Hidrológico de la Cuenca del Ebro está en exposición pública para presentar alegaciones hasta el mes de Noviembre. No somos especialistas, por lo que hemos solicitado a unos buenos amigos que nos den una mano con el tema de los caudales, no nos vayamos quedar encallados en alguna gravera del río.

Caudal del Cinca a tiempo real por el puente Las Pilas, según la CHE (Enlace)

PNL pendiente en las Cortes de Aragón (Enlace)